*Expresa lo que sientes sin apasionamiento. Trata el tema sin atacar a tu pareja.
*Intenta ponerte en su lugar. Es una regla que evita muchas discusiones innecesarias.
*Elimina el rencor. No aproveches para sacar trapos sucios del pasado.
*Deja que el calor se enfríe. Espera 30 minutos o un par de horas si es necesario para estar más tranquilo y ver las cosas con mayor objetividad.
*No te vayas nunca a la cama sin arreglar el problema. Pero no dejes que el tema se enfríe demasiado porque, en una discusión, el tiempo siempre juega a vuestro favor.
Revista Psicología Práctica.
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